BUGAMBILIA.

Foto: Banco de imágenes gratuitas.

Deambulaba por las cuatro estaciones
sin tápalo y sin comida,
se detuvo en la primavera,
atraída por los cánticos
de los gorriones y los cenzontles,
los aromas de las gardenias y los
jazmines.
Sentíase bugambilia de los
panorámicos ventanales,
amaba a los niños y a los animales,
recorría la ciudad con libro en mano
no lloraba, ni reía.
Indiferente a todo, un día intentó reclamar
lo que creía le pertenecía y
con irreverente furia, fue vejada…
Su vida, un abanico de erróneas decisiones
cuando quiso rectificar,
era tarde y nada se podía resarcir
porque la acusaban de
chantajista y mantenida.
Hoy, divaga por la

avenida de la soledad

con la esperanza
de que el agresor alivie el
rencor que en su alma anida
para que el efecto bumerán no lo
alcance, al final de la travesía.

‘Las antipatías violentas son siempre sospechosas y revelan una secreta afinidad’. William Hazlitt (1778-1830) Literato inglés.

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